En medio del actual conflicto en Medio Oriente —particularmente entre Irán y potencias como Estados Unidos e Israel—, los mercados internacionales han reaccionado con nerviosismo. Y aunque el conflicto parezca lejano, el impacto podría sentirse directamente en nuestros bolsillos.
Durante las últimas semanas, los enfrentamientos y amenazas en la región del Golfo Pérsico, cerca del Estrecho de Ormuz (por donde pasa casi el 30% del petróleo mundial), han disparado la especulación financiera. El precio del petróleo Brent —referente para Perú— rozó los 81 dólares por barril, aunque esta semana bajó a alrededor de 68 USD, una caída del 15% en menos de 24 horas.
Sin embargo, la volatilidad persiste. Según analistas internacionales, cualquier nuevo ataque, bloqueo marítimo o escalada militar podría llevar el crudo por encima de los 85 USD, encareciendo directamente el combustible que usamos día a día.
¿Cómo nos afecta a los que andamos en moto?
- Gasolina más cara en grifos: Aunque el precio del petróleo bajó ligeramente, sigue siendo alto en comparación con mayo. Esto significa que los precios en grifos podrían subir en las próximas semanas.
- Costos operativos en aumento: Si sube la gasolina, también lo hacen otros insumos: lubricantes, aceites y hasta servicios técnicos pueden verse afectados, ya que muchos dependen del transporte de mercancías.
- Impacto en viajes largos: Para quienes planean motorutas por Fiestas Patrias o travesías de fin de semana, será importante estar atentos al precio del combustible antes de salir. Un alza de 0.30 o 0.50 soles por litro puede hacer una diferencia en recorridos largos.
¿Qué está haciendo el Estado?
Perú cuenta con el Fondo de Estabilización del Precio de los Combustibles (FEPC), que ayuda a suavizar las alzas bruscas. Sin embargo, este fondo no siempre cubre todos los tipos de gasolina ni evita del todo las subidas. Además, las regulaciones del Osinergmin ajustan precios semanalmente con base en los precios internacionales, por lo que los efectos llegan con cierto retraso.
Aunque el conflicto en Medio Oriente ocurre a miles de kilómetros, sus repercusiones en el mercado del petróleo pueden sentirse en todo el mundo, incluido el Perú. A pesar de posibles aumentos en el precio de la gasolina, no debemos perder de vista una gran ventaja: conducir una motocicleta sigue siendo considerablemente más económico que movilizarse en auto. Incluso con ligeros incrementos en el combustible, seguimos ahorrando en consumo, mantenimiento y tiempo. En tiempos de incertidumbre, moverse en moto es, más que nunca, una decisión inteligente.