La normativa de peso mínimo combinado, vigente en el Mundial de Superbike desde finales de 2023, establece que la suma del peso del piloto y de la motocicleta debe alcanzar un valor mínimo determinado. Si un piloto es más ligero, debe añadir lastre a su moto para cumplir con la regla, buscando así equilibrar el rendimiento entre competidores de distintas complexiones.
El dos veces campeón mundial de Superbike, Álvaro Bautista, declaró recientemente que esta medida representa una amenaza para su seguridad y la de otros pilotos de complexión ligera.
Bautista explicó que debe añadir alrededor de 7 kg a su Ducati, lo que incrementa significativamente la inercia lateral del conjunto, especialmente en curvas rápidas. Atribuye varias de sus caídas a este aumento de peso, lo cual, asegura, ha reducido su control y estabilidad en la pista.
“El problema ya no es ganar o perder… se trata de seguridad”, afirmó el piloto, sosteniendo que esta regla puede poner en riesgo “la vida de los pilotos ligeros” y calificándola como una forma de discriminación.
Además, señaló que esta situación ha afectado su futuro profesional, ya que su contrato con Ducati no será renovado para 2026. Bautista, actualmente libre en el mercado, se muestra esperanzado en encontrar una opción competitiva y reafirma que no desea asumir un rol de probador; su deseo es seguir compitiendo.
Su postura también ha tenido eco en medios internacionales, donde ha recalcado que esta normativa le hace “arriesgar su vida más que los demás” y que es necesario revisar la norma en aras de una competencia más justa y segura.
A diferencia de MotoGP, Moto2 o Moto3, donde no existe una normativa de peso combinado, el Mundial de Superbike introdujo esta medida en un contexto de debate interno. La idea surgió tras quejas de algunos competidores, como Scott Redding, quienes sostenían que Bautista contaba con una ventaja física debido a su menor peso. Sin embargo, el español argumenta que la aplicación de esta regla ha cambiado radicalmente la forma en que pilota, afectando su rendimiento y, sobre todo, comprometiendo su seguridad.
Las declaraciones de Álvaro Bautista sobre la norma del peso mínimo han encendido la alerta dentro del paddock. Lejos de ser una queja personal, el campeón insiste en que se trata de un asunto de seguridad y equidad deportiva. El futuro del reglamento y de su propia carrera en Superbike está en juego.
