Durante esta semana, Argentina se ha convertido en el punto de encuentro del mítico club Hells Angels, que celebra en el país su World Run 2025, la reunión más importante de su calendario anual y una de las más grandes del motociclismo internacional.
El evento reúne a cientos de motociclistas provenientes de distintos países, quienes se congregaron en la zona de La Plata y Berazategui para participar en jornadas de camaradería, exhibiciones y conciertos. Aunque originalmente la sede iba a ser el camping del sindicato SOSBA en Ensenada, el encuentro se trasladó finalmente a un predio en Berazategui por cuestiones logísticas y de habilitación.
Más de 500 miembros del club se dieron cita en esta edición del World Run, un encuentro que suele rotar cada año entre distintos países y que, por primera vez, tiene lugar en Argentina. Para muchos aficionados, la llegada del evento representa un reconocimiento al crecimiento del motociclismo latinoamericano y a la consolidación de la región como un punto de referencia para rutas y encuentros internacionales.
Marcelo Mazza, representante local de los Hells Angels, destacó que el propósito de la reunión es “celebrar la hermandad y el espíritu motero”, y afirmó que “Argentina está en el mapa del club y del motociclismo mundial”.
Las actividades incluyen recitales, ferias gastronómicas y exposiciones de motocicletas, con un despliegue de organización que busca equilibrar la logística del evento y el impacto turístico en la zona. Autoridades locales, por su parte, implementaron un operativo de seguridad preventiva, sin que hasta el momento se hayan registrado incidentes.
Aunque el nombre de los Hells Angels suele despertar controversia en distintos países, la realización del World Run 2025 en Argentina se percibe como una oportunidad para mostrar el costado más social y cultural del motociclismo de hermandad, ese que trasciende fronteras y lenguas bajo una misma pasión: la moto.
