Todos los equipos y pilotos de MotoGP se reunieron en un evento sin precedentes en Tailandia, donde Marc Márquez se robó el show .
MotoGP ha dado un paso más en su evolución como espectáculo global. Siguiendo el modelo de la Fórmula 1, la categoría reina del motociclismo organizó por primera vez una presentación conjunta con todos los equipos y pilotos. El evento se llevó a cabo en Bangkok, Tailandia, y fue una auténtica fiesta para los seguidores del campeonato.
Las 22 motos de la parrilla fueron alineadas en un gran escenario antes de la aparición de los protagonistas. Primero subieron los directores de equipo, quienes ofrecieron algunos detalles clave sobre la temporada que está por comenzar. Destacaron declaraciones como la de Massimo Rivola, quien informó que Jorge Martín sigue recuperándose tras su caída en Sepang, y la de Davide Brivio, confirmando la presencia de Raúl Fernández en los test de Tailandia.
Uno de los momentos más esperados fue la entrada de los pilotos. Antes de subir al escenario, realizaron un desfile en motos de calle con los colores de sus escuderías. Sin embargo, no todo salió según lo planeado: la moto de Joan Mir tuvo un fallo y el piloto tuvo que completar el recorrido como pasajero de Luca Marini.
El público enloqueció cuando aparecieron Marc Márquez y Pecco Bagnaia, los dos máximos contendientes al título. Márquez, siempre carismático, se bajó de su moto para caminar entre los aficionados, generando un estallido de emoción. Ambos fueron los únicos en lanzar merchandising autografiado al público, lo que desató una auténtica locura.
“Es un honor formar parte de este momento histórico. Tailandia es especial para mí porque aquí celebré mi octavo título. Sé que la competencia será dura, pero estoy listo para el reto”, declaró Márquez en el escenario.
El evento también tuvo su dosis de espectáculo con Jack Miller, quien hizo un espectacular “donut” sobre su Yamaha del equipo Prima Pramac, dejando huella entre los fanáticos tailandeses. La interacción entre los pilotos y el público fue clave para hacer de esta presentación un éxito.
El broche de oro fue la tradicional foto de grupo con todos los pilotos y la imagen final de Pecco Bagnaia tomándose un selfie con el resto de la parrilla. Ahora, la mirada de todos está puesta en los test de Buriram, donde comenzará la verdadera batalla en pista.
Con esta presentación histórica, MotoGP demuestra que está apostando por la espectacularidad y la cercanía con los fanáticos. La temporada aún no ha comenzado, pero la emoción ya está en su punto más alto.