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Mototurismo: Suspiros de Libertad, “Perdidos en la Selva”

SUSPIROS DE LIBERTAD – PERDIDOS EN LA SELVA.

Artículo de Abrahan De La Cruz

La mente empieza a volar y el corazón a regocijar de mil colores, y es que una vez más nos aventurábamos en dos ruedas, que es lo más cercano a volar, a vivir en plena libertad.

“No cualquiera se vuelve loco, esas cosas hay que merecerlas”- Julio Cortazar.
Si, sentado sobre Perla (mi moto) con el pecho abierto al mundo, disfrutando del viento en la cara, tratando con mis ángeles y demonios internos, limpiando el alma a cada kilómetro me aventuraba una vez más; partiendo de la costa limeña, para sumergirme entre los apus o montañas de nuestra mística cordillera y terminar curveando entre el verde selva de nuestro hermoso y amado Perú.

¿La ruta de ida?. En esta ocasión nos aventurábamos partiendo desde Lima-Ticlio-Jauja-La Mercerd-Oxapampa-Pozuzo, quiero mencionar que ya había ido en 4 ocasiones de ruta por la selva central con la consigna de llegar a Oxapampa-Pozuzo pero por diferentes motivos de la vida me desviaba al final del camino o idea inicial, bueno en esta 5ta vez adelanto que conseguí por fin llegar a Oxapampa-Pozuzo, al llegar fui tan feliz que entendí que siempre será al tiempo de Dios, no al de uno. Sin embargo, las cosas se complicaron por momentos, quededándonos hasta varados en medio de la selva. Si quieres saber cómo salimos de ese incidente; datos sobre la ruta de Lima hasta Pozuzo con paradas fijas para disfrutar de los paisajes y contribuir a la activación del turismo no te pierdas esta nota.

SI VAS A INTENTARLO, VE HASTA EL FINAL


“… Todo lo demás sólo sirve para poner
a prueba tu resistencia,
tus auténticas ganas de hacerlo.
Y lo harás.
A pesar del rechazo y
de las ínfimas probabilidades,
y será mejor que cualquier cosa
que pudieras imaginar.
Si vas a intentarlo,
ve hasta el final.
No existe una sensación igual.
Estarás sólo con los dioses
y las noches arderán en llamas.
Llevarás las riendas de la vida
hasta la risa perfecta,
es por lo único que vale
la pena luchar.”

— Charles Bukowski

DÍA 1:

Para los que somos adultos con espíritu de niño y aún tenemos vivo a nuestros padres, siempre será difícil para ellos la despedida, y mamá Lulú no era la excepción.
Así que 04 am, con la bendición de Lulú salíamos de Lima la gris con la fe a tope.
La primera parada sería un buen desayuno en Chosica, según “el plan”; y es que hay que mencionar que cada viaje consta de tres partes, el primero es cuando lo sueñas, el segundo cuando lo planeas, y el tercero cuando lo ejecutas y es ahí donde se debe improvisar y seguir adelante. Bueno tomamos un nutritivo y rico desayuno cerca de la plaza de Chosica, de paso estirábamos y a la vez comprabamos pastilla para el mal de altura o soroche antes de pasar TICLIO. La sgt parada sería en la entrada de Matucana, si eres de chaqchar coca aquí puedes encontrar, a la vez esta parada es de 15 – 30 minutos para estirar y aclimatarse de a pocos a la altura, y fundamental abrigarse ya que el frío en TICLIO es duro. No es la primera vez que paso TICLIO y sin embargo, sigue siendo un reto y un punto duro en la ruta superar las altura y el frío gélido de Ticlio, bueno pasamos sin mayor novedad, continuamos por  La Oroya para seguir ruta a Jauja, podíamos seguir defrente por Tarma y llegar en un día a la Merced pero preferimos disfrutar de una rica Pachamanca en Jauja al frente de la majestuosa Laguna de Paca, visitar su bonita plazita  y descansar.

DÍA 2:

Despertamos temprano en Jauja, un buen desayuno y partimos. El primer tramo es la ruta de Jauja-Tarma, siempre es un placer cruzar los andes, este tramo el frío es manejable y la vista es hermosa.

“La tierra tiene música para quienes la escuchan.
Prácticamente todo el mundo puede aprender a pensar, crecer o conocer; pero no hay ni un solo ser humano al que se le pueda enseñar a sentir. ¿Por qué?, porque cuando piensas, crees o conoces, eres muchas otras personas. Pero en el momento que sientes eres solo tú mismo, y ser tú y nadie más que tú en un mundo que se esfuerza día y noche por convertirte en cualquier otra persona, significa luchar la batalla más difícil a la que se pueda enfrentar cualquier ser humano”.

Y es así que llegamos a “Tarma – La Perla de los Andes”, al llegar tienes una vista de pueblitos y ciudad preciosa rodeada por campos de flores. Puedes aprovechar aquí para tomar desayuno y descansar en el campo rodeado de buena vibra, colores y naturaleza.
Ya descansados, luego partimos a la Selva Central, aquí entre la transición entre la sierra y la selva tenemos un símbolo y es el “Tunel de Yanango”, es una vía subterránea tiene una longitud de 1.025 Km por lo que es el segundo túnel tallado en roca más largo del Perú, luego del túnel Punta Olímpica de Áncash. Cuenta con tres carriles, 2 carriles de San Ramón a Tarma y un carril de Tarma a San Ramón. Pasar este túnel en verdad emociona, por su infraestructura ya que parece la salida de una baticueva y también porque es el cambio de clima, la perfecta transición entre la sierra y la selva.
Ya en San Ramón puedes detenerte a almorzar o tal vez antes en la entrada haces una parada para tomarte algunas fotos en la portada de “Bienvenidos a San Ramón Puerta de Oro de la Selva Central” y media hora más de ruta puedes hacer otra parada para refrescarte con aguita de coco al lado de la carretera.
Camino a la Merced hay varios hospedajes rústicos y temáticos al alcance del bolsillo, nosotros elegimos quedarnos en “El Pionero”, para así disfrutar un piscinazo por la noche. En la plazita de la merced puedes tomar tours o full days desde S/40.00 y también tienes restaurantes cercanos para almorzar o cenar. AL día sgt nos fuimos para Oxapampa, sin antes visitar el pte Kimiri, puente colgante que te ofrece una hermosa vista y a la entrada debes degustar los deliciosos helados artesanales, sería un pecado irte sin probarlos.

DÍA 3:

Se perdió el laberinto. Se perdieron
todos los eucaliptos ordenados,
los toldos del verano y la vigilia
del incesante espejo, repitiendo
cada expresión de cada rostro humano,
cada fugacidad. El detenido
reloj, la entretejida madreselva,
la glorieta, las frívolas estatuas,
el otro lado de la tarde, el trino,
el mirador y el ocio de la fuente
son cosas del pasado. ¿Del pasado?
Si no hubo un principio ni habrá un término,
si nos aguarda una infinita suma
de blancos días y de negras noches,
ya somos el pasado que seremos.
Somos el tiempo, el río indivisible,
somos Uxmal, Cartago y la borrada
muralla del romano y el perdido
parque que conmemoran estos versos.

—Luis Borges.

Y llegó el día, por fin la idea de llegar a Oxapampa se concretaría. Así que viento en la cara y emoción cual final de futbol, partimos. La ruta es hermosa, la vas a disfrutar como no te lo puedes imaginar.
A cada kilómetro que vas avanzando, se hace más difícil diferenciar la fantasía de la realidad, y es que en verdad la ruta es verdemente hermosa. Pareciese que viajaras con fondo musical, entre en trance y por ratos escuchas cantar a los árboles y silbar melodiosamente al viento. Las casitas que acompañan la llegada a Oxapampa son como las pintas en un cuento de hadas.  Y entonces plash se avizora el letrero de “Bienvenidos a Oxapampa”, la felicidad entonces atrapa al corazón en ese instante y agradeces a Dios, a la vida y tu moto por tanto.
Ya en Oxapampa, queríamos recompensar al estomago así que fuimos por un buen almuerzo digno de los dioses, ya me habían advertido que la cezina en Oxapampa es de otro nivel y en efecto, estuvo delicioso, acompañado de su ricar cerveza propia del lugar.
Para pasar la noche, nos pusimos caprichosos y buscamos algún hotel lindo con piscina y buen ambiente para relajarnos, ya que a la mañana sgt amaneceríamos para llegar a Pozuzo.

Día 4:

Con el canto de los pajarillos despertabamos 05 am, alistábamos cosas ligeras para el viaje, nosotros pensábamos sería un full day, es decir ida y vuelta de Oxapampa a Pozuzo es por eso que dejamos la mayoría de nuestro equipaje en el hotel. En definitiva, no sabíamos lo que nos esperaba.

“Fragmento Hermann Hesse (1877-1962)

Los árboles son santuarios. Quien sabe hablar con ellos y sabe escucharlos, descubre la verdad. Ellos no predican doctrinas ni recetas. Predican, indiferentes al detalle, la originaria ley de la vida.

El árbol dice: en mí hay escondido un núcleo, una luz, un pensamiento. Soy vida de la vida eterna. Único es el propósito y el experimento que la madre eterna ha hecho conmigo. Únicos son mi forma y los pliegues de mi piel, así como único es el más humilde juego de hojas de mis ramas y la más pequeña herida de mi corteza. Fui hecho para formar y revelar lo eterno en mis más pequeñas marcas.

El árbol dice: mi fuerza es la confianza. No sé nada de mis padres y no sé nada de los miles de hijos que cada año nacen de mí. Vivo, hasta el final, el secreto de mi semilla y de nada más me ocupo. Confío que Dios está en mí. Confío que mi misión es sagrada. Y de esta confianza vivo”.

La señal de Gps es débil por allá, así que tocaba llegar a la antigua, es decir, preguntando a los amigos lugareños del lugar. Nos advertían que el camino o ruta hacia Pozuzo era accidentando, pero decía yo que Perla es fuerte y aguantaría. Bueno, continuamos la ruta, el camino era angosto al principio asfaltado luego se hizo trocha accidentada, con curvas, abismos, túneles, y bosques hermosos-Parque Nacional Yanachaga Chemillén; no por algo se nombró a Oxapampa como Hábitat Natural o Reserva de Biosfera por la UNESCO.
Ya habían pasado más de 2 hrs de ruta sin cruzarnos con algún auto o persona, entonces, sin señal creímos habernos perdido y temíamos haber tomado un camino incorrecto, así que en medio de la selva decidimos parar para estirar el cuerpo y pensar más tranquilo que hacer. Debo ser sincero, así que estar en medio de tanta naturaleza solo y sin señal me intimido por lo que subí a Perla y decidí dar vuelta de regreso. Sin embargo, por caprichos de la vida o de Perla, mi moto ya no prendió más. Sude frío y hasta en su momento renegué, luego más calmado con el poco o nada de conocimiento de mecánica revise la batería, conexión, bujía, entre otros, sin llegar a tener éxito alguno. Entonces me reía no se si desesperación para darme animo o porque me alucinaba de tarzan acampando en medio de la selva, luego decidí empujar la moto con la esperanza de llegar a algún pueblo, ya no había forma de volver por lo accidentado del camino. Luego de 1 hra aproximadamente en mi viacrucis empujando a Perla, limpiando mis demonios e invocando a mis ángeles, se apareció  un auto, quién muy amablemente me aconsejo en dejar la moto a un lado del camino y llevarme hasta el pueblo de Pozuzo para allá conseguir un mecánico y volver por Perla, nadie quería ir hasta que un mecánico escucho mi pequeña historia, y se solidarizo con mi causa, ya que él contaba que se vino desde Madre de Dios hasta Pozuzo y sabe lo que es Moto-viajar. Voy a quedar agradecido con él por toda la vida. La falla era el alternador que ya había muerto, sin embargo, pudimos solucionar el problema y llevar a Perla hasta Pozuzo para que pueda ser revisada a detenimiento, así que toco pasar la noche en Pozuzo para al día sgt 06 am subir al paraíso que es “Agua Salada”.

Día 5:

POZUZO Y LAS POZAS TURQUESAS DE AGUA SALADA
Este paraíso terrenal de aguas refrescantes  de color turquesa se encuentra en medio de la selva central. Su belleza es incomparable debido a su tonalidad turquesa, la abundante  vegetación que lo rodea, la playa blanca  y sin contar sus beneficios por sus aguas saladas y con azufre que  tienen propiedades curativas que revitalizan y relajan los músculos quitando todo el estrés de la ciudad.
Las Pozas Turquesas de Agua Salada, se ubican en el Bajo Chancarizo, a 10 kilómetros ó 30-40 min del centro del pueblo de Pozuzo. Llegar a este paradisiaco lugar en medio de la selva con Perla, valió toda la Odisea vivida. Definitivamente tienen que venir a este pedacito de cielo del Hermoso Perú.
Luego, de disfrutar de Pozuzo, su rica comida y deliciosa cerveza volvimos a Oxapampa para descansar y volver, haciendo una parada por VillaRica.

DÍA 6 y 7:

Luego de la Odisea de Oxapampa-Pozuzo cumplimos la misión, así que decidimos volver sin antes darnos una vuelta por Villa Rica.
“Villa Rica, Tierra del Mejor Café del Mundo”. La ruta Oxapampa-Villa Rica, es una ruta amigable y cálida acompañada del verde selva, llegamos a la casa de un amigo de la universidad, “Brusett Escobar” nos recibió en su bonita casa, con el riquísimo y exquisito café que él mismo produce. Es grato ver a un amigo después de tiempo y que mejor compartiendo una taza del mejor café del mundo, decidimos quedarnos un día más a tan grata hospitalidad, para así poder visitar “Las cataratas del León” y la “Laguna Oconal”, puntos turísticos que tienen que ser tus fijas si es qué visitas la selva central.

DÍA 8:

De vuelta a Lima, con la mochila llena de aventuras, hermosos paisajes y efímeras amistades de la.
Si, tal vez no hay postales ni souvenires, no hay selfies ni vídeos a vuelo de drone, capaces de captar todo lo que se vivió y se disfrutó en esta ruta, cómo un destino puede llegar a transformarnos, quizás a volvernos un poco más justos, más honestos, más valientes, más sensibles del aquí y ahora, del no dejar los “te quieros” y sueños para más tarde…

No hay fórmula alquimista que sinteticen la senación del mejor atardecer que hayan visto estas retinas viajeras, o de aquella leche de Luna en medio de la selva, o de las huellas de Perla que dejamos en el fango o de los tantos suspiros de libertad que soltamos en esta ruta.
Si el Barbas (Dios) quiere volveremos, hasta entonces.

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